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- 10 Marzo 2022
El posicionamiento de marca se refiere al espacio único que se forma ésta en la mente del consumidor. La posición es fundamental a la hora de lanzar un producto al mercado. Es algo que se debe tener en cuenta cuando desarrolles tu plan de acción.
A continuación, recomendamos los cuatro pasos a seguir para posicionar tu marca de una forma adecuada:
Paso 1: la importancia de la calidad
Nuestra marca no va a tener más difusión porque nuestro público objetivo sea mayor. Lo importante es la calidad de ese público, no la cantidad. Debemos pensar qué consumidores tienen preferencias similares y crear grupos homogéneos. Para ello existen distintas técnicas:
-Análisis conjoint, metodología de investigación que mide el valor que tienen para el consumidor los atributos que forman un producto o servicio y que establece las necesidades e importancia relativa de cada uno de ellos.
-Estudio multi-dimensional que agrupa a los consumidores en clúster, es decir, trata de lograr que los usuarios sean lo más similares posibles.
-Análisis discriminante que determina las características demográficas de cada segmento.
Paso 2: la elección de la sección
La selección del segmento objetivo teniendo en cuenta los beneficios de dirigirse a ese segmento; el nivel de competencia y el vínculo que puede existir entre la marca y el mercado. Para ello, la empresa debe conocer sus fortalezas y debilidades para competir en el segmento elegido.
Paso 3: Diferenciarse de la competencia
Debemos buscar el hueco para nuestros productos y valorar cómo están posicionados los productos de la competencia. Debemos establecer un listado de características y asociarlas a las marcas. Tras esto, elegiremos un atributo y la razón por la que será creíble para el segmento elegido y valorar el beneficio que se obtiene con nuestro producto.
Paso 4: Consolidar un buen posicionamiento
Hay que crear y justificar el posicionamiento con los usuarios a través de estudios cuantitativos y cualitativos recurriendo a sesiones de grupo. A partir de ahí comunicaremos al mundo nuestro posicionamiento en el mercado diseñando un plan de comunicación para enviar nuestro mensaje asentándolo en la mente del consumidor. Ese posicionamiento varía con el tiempo ya que la asociación entre una marca y una característica cambia por la competencia, el lanzamiento de nuevas marcas y a través de las nuevas tecnologías. Por lo tanto, hay que estar testeándolo continuamente y adaptándose a los posibles cambios.
En suma, hay que ser creativos, originales y moldeables a los cambios para conseguir un buen posicionamiento de marca.