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- 23 Marzo 2022
Toda la información que puede ser digitalizada también puede resultar dañada. ¿Cómo evitarlo? Os damos cinco consejos para disminuir tu exposición en la red.
1. Crear una contraseña difícil y cambiarla con frecuencia
El objetivo de una contraseña compleja es que sea difícil de descubrir para una persona o un programa. Tienes la posibilidad de hacer su contraseña mucho más complicada de revelar utilizando más caracteres, mezclando letras mayúsculas y minúsculas e incluyendo números y caracteres especiales.
2. Usar doble factor de autenticación
Además de la contraseña, se recomienda emplear otros métodos para verificar el inicio de sesión. El doble factor de autenticación se puede hallar dentro del menú de configuración en las redes sociales y en el correo electrónico (o la opción Mi cuenta en Gmail).
3. Mantener el software actualizado
Tener el software al día resulta primordial para impedir posibles ataques, puesto que en cada actualización se incorporan los últimos parches de seguridad.
4. Hacer una copia periódica de los archivos
Es fundamental hacer un back up reiterado (por ejemplo, una vez a la semana) de los archivos más importantes. Lo idóneo es que se guarden en un disco externo y no solo en la nube para así estar protegido en caso de ser víctima de un ciberataque.
5. Pestaña incógnito
Cuando se navega en modo incógnito, algo que se puede hacer desde Google Chrome ingresando en el menú de configuración -es suficiente con hacer clic en los tres puntos situados en el margen derecho superior del buscador-, se evita que el navegador almacene la actividad relacionada con los sitios que se visitaron, como el historial de búsqueda y las cookies.